Andrés Vera, olímpico: 'mi primer objetivo era llegar a la salida porque a partir de ese momento mi cabeza no funcionaba, solo trabajaba'

Entrevista al mediofondista de Castellón Andrés Vera, y a la psicóloga del deporte y vicedecana 3ª del COPCV, Mª Carmen Molés.

 Andres Vera y Mª Carmen Molés con la antorcha olímpica

Los Juegos Olímpicos 2024 han comenzado, centenares de deportistas de élite de todo el mundo llevan años entrenando para llegar a esta cita al 100%. Un camino largo en el que actualmente se sabe que hay que trabajar físicamente teniendo muy en cuenta la parte emocional y psicológica, entre otros aspectos.

Mª Carmen Molés, vicedecana 3ª del COPCV y psicóloga del deporte, explica cómo se trabaja la parte psicológica ante una competición de tal calibre mientras que el olímpico Andrés Vera, nos cuenta cuáles eran los ejes de los entrenamientos de hace 40 años comparándolos con los actuales y cuál fue su experiencia en las Olimpiadas de 1984 celebradas en Los Ángeles.

El atleta castellonense participó en los 1.500 metros quedando séptimo de esta modalidad, siendo diploma olímpico con 3:37:02 y convirtiéndose así, en un referente del ámbito deportivo. Para llegar hasta aquí, Vera tuvo que realizar muchas competiciones e incluso mejorar sus tiempos. El mediofondista afirma que, a pesar de la presión y el estrés, la parte emocional y psicológica no se tenía en cuenta y cada deportista hacía frente a sus emociones como podía, sin ser conscientes si tenían o carecían de unas u otras herramientas.

 

Andrés, ¿qué sensaciones o emociones tenías tú antes y durante los Juegos Olímpicos en los que participaste?

A.V.: En mi época, en España había mucha competencia en medio fondo y aunque ya tenía la mínima olímpica no me confirmaron mi asistencia hasta que no demostré sobradamente que podía correr. Me exigieron correr varias carreras y mejorar mis tiempos por lo que fue temporada previa de bastantes nervios y presión hasta que demostré que valía.

Una vez me confirmaron mi asistencia a las olimpiadas, viví un gran momento de euforia y emociones muy positivas. La llegada a Los Ángeles y a la villa olímpica conllevaba muchas emociones de disfrute y de emociones al máximo. A medida que pasaban los días y se acercaba la competición, aparecieron los nervios, el estrés y los miedos.

Y ya en competición… corrí tres carreras (eliminatorias, semifinal y final), tres días seguidos con lo que esto conlleva. Ahora se descansa uno o dos días porque se sabe que el descanso también forma parte del entrenamiento ya que es necesario para la recuperación.

El día de la competición, hay un periodo largo desde que te levantas hasta que compites. En mi caso, competía a las 17h. pero tuvimos que salir de la villa tres horas antes, calentar, luego ir a la cámara de llamadas donde te revisan el material y cuando salí al estadio en el que, solo sentados había 80.000 personas viendo las carreras… el nivel de nervios, estrés y miedo es altísimo. Miedo a no cumplir las expectativas, ganas de huir pero miedo también de hacerlo. En cuestión de segundos, pasas por todas las sensaciones posibles pero todo esto pasa porque cuando dan el tiro de salida, ahí se olvida todo y no escuchas nada más, solo a tu cuerpo y plena atención a exprimirlo para dar el máximo rendimiento.

 

¿Con qué herramientas crees que contabas para gestionar el estrés, la emoción y el miedo que comentas?

A.V.: No entrenábamos para esto así que creo que contaba con mi personalidad. Soy una persona aparentemente tranquila, no adelanto acontecimientos y les hago frente cuando llegan así que creo que automáticamente me regulaba. Además, duermo muy bien independientemente del contexto y esto me permitía descansar muy bien.

Era muy consciente que mi primer objetivo era llegar a la salida porque sabía que a partir de ese momento mi cabeza no funcionaba, sino que solo trabajaba para la carrera que era para lo que estaba preparado (físicamente y no mentalmente).

 

¿Cómo te preparaste para las Olimpiadas? ¿Se tenía en cuenta la parte de nutrición y la psicológica? En estos aspectos, ¿ves muchas diferencias con la actualidad?

A.V.: En aquel momento, en 1984, fundamentalmente se tenía en cuenta el entrenamiento físico, mucha carga de entrenamiento, mucha competición y sobre todo los posibles resultados se basaban todos en el entrenamiento y como eso lo asimilaras y llevara a la competición.

Tímidamente se comenzaba a hablar de la alimentación y de la nutrición. Yo vivía en la residencia y esto lo supervisaba un médico y no nutricionista porque no existía esta especialidad. El área psicológica directamente no se trabajaba.

Si comparamos qué se hacía hace cuatro décadas con cómo se trabaja actualmente, observamos muchas diferencias incluso en el entrenamiento físico, antes eran generales y ahora se diseñan de manera muy personalizada y se tienen muy en cuenta el descanso y la nutrición como aspectos básicos. Cada deportista lleva una supervisión enorme.

Personalmente, la parte psicológica siempre me ha parecido el elemento diferencial entre un deportista y un gran gran deportista. También ha cambiado mucho el material deportivo el cual ayuda mucho a los deportistas a competir en las mejores condiciones, a recuperarse mejor muscularmente y a sacar más rendimiento de sus competiciones y carreras.

 

¿Cómo de importante es la parte emocional a la hora de preparar una cita deportiva de estas dimensiones?

A.V.: En nuestra época directamente no se trabajaba. Teníamos un entrenador y un seleccionador nacional que basaba toda nuestra confianza y resultados en la capacidad de asimilación de los entrenamientos y el mayor volumen posible. Independientemente de esto, al final, todos hacíamos nuestros ejercicios personales, pero para mí, lo que siempre ha marcado la diferencia ha sido el aspecto psicológico ya que yo tenía muchos compañeros que hacían grandes entrenamientos y grandes resultados, pero en la competición fallaban porque la presión podía con ellos. Resulta satisfactorio ver que hoy en día sí que se pone el foco y es vital.

Ahora, los deportistas están supervisados por profesionales y tener un psicólogo que les ayuda y enseña a visualizar, bajar estrés y la presión y ver realmente sus capacidades.

 

MC.M.: La preparación psicológica ha ido cobrando importancia a lo largo de los años, en España Barcelona 92 fue un hito. Es tan importante la preparación física como la preparación psicológica. Hay que entrenar la presión mediática a la que están sometidos, la gestión del estrés y la ansiedad. Además de la cohesión de equipo ya que muchos compiten representando a un país, aunque compitan en deportes individuales.

Lo importante es integrar el trabajo del/la psicóloga deportiva dentro de la preparación físico y técnico-táctica. Hay una fase inicial de psico educación en el que se trabajan los objetivos claros y realistas de lo que van a ser los cuatro años de trabajo, no solo del resultado final sino también del proceso, ya que estas metas ayudan al deportista a mantenerse motivado y comprometido durante todo el periodo de preparación.

 

¿Con qué problemas o inconvenientes se pueden encontrar durante los años de entrenamiento? ¿Y en las propias Olimpiadas?

A.V.: Destacaría la asimilación del entrenamiento, aunque los deportistas que están en unas olimpiadas ya lo han asimilado e integrado. El tema de las lesiones afecta mucho al deportista al preolímpico ya que tienen que competir al máximo nivel para ir consiguiendo resultados y que vayan seleccionando y entrando en el camino hacia los Juegos. Y en los Juegos pasa la mismo, las preocupaciones ante lesiones o molestias siempre están presentes, hay que intentar manejarlas lo mejor posible porque afecta mucho psicológicamente a un deportista que desea obtener el mejor resultado. 

 

MC.M: Dentro de los principales problemas nos encontramos con la duración de la preparación, son cuatro años de trabajo intenso y que a su vez está lleno de dificultades que han de afrontar, incluidas las lesiones, en algunos casos la distancia de sus familiares y la cantidad de horas que entrenan, dado que muchos de ellos, solo se dedican a preparar las olimpiadas.

 

El hecho de que la organización sea mundial, y mediáticamente tenga tanta repercusión, ¿conlleva más presión? ¿cómo se trabaja?

A.V.: A nivel deportivo es el mayor exponente en todas las espacialidades con lo cual, es un gran escaparate a nivel mundial. Los deportistas saben que están expuestos y que los están viendo millones de personas (de su país, de sus federaciones, etc.). Por ello, la presión y el estrés es enorme pero los deportistas de élite ya saben lo que es competir ante centenares de personas y lo tienen asumido.

Antes gestionar esto era un tema autónomo de cada uno de los deportistas. Hoy, esta presión se trabaja mucho con grandes profesionales que hacen que se canalice y no afecte al rendimiento pudiendo sacar el máximo partido en sus competiciones.

 

MC.M:  Se trabaja el control del estrés y la gestión emocional con rutinas para afrontar estas situaciones. Los Juegos Olímpicos en sí mismo son un desafío no solo deportivo, sino que se prepara también a los atletas a enfrentarse a la incertidumbre y manejarla desde una actitud más proactiva.



Noticias relacionadas

  • 07/08/2024
Reapertura para la presentación de nuevas solicitudes de Certificados EuroPsy

El Consejo General de la Psicología de España informa sobre los requisitos y la forma de pedir estos certificados europeos.
Leer

  • 07/08/2024
Les vacances d'estiu són un període excel·lent per a enfortir els llaços afectius amb els nostres fills i filles

I com tot aprenentatge té una base emocional, es pot crear el context adequat per a potenciar la curiositat, el descobriment i el gust pel saber proposant-los activitats diferents a les que realitzen a les aules. Fins i tot ‘no fer res’ o l'avorriment’, són recursos que aprofitar.
Leer

  • 20/06/2024
Horario para las fiestas de Hogueras / Horari per les festes de Fogueres

Horario de atención al público en la sede de Alicante. Horari d'atenció al públic en la seu d'Alacant.
Leer

  • 19/06/2024
LIBRO: ¡Pánico! Psicoeducación para el trastorno de ansiedad infantil

Autores: Aroa Borrás Barrachina y Francisco Conesa Beltrán. Ed. Pirámide
Leer

  • 12/06/2024
Autónomos - Comunicación a la Seguridad Social

El plazo finaliza el 30 de junio.
Leer